En el bar, se sentaron durante algún tiempo y había un par de tragos. Sara vio su trabajo en torno a él, tocar ligeramente su brazo con sus dedos, frotar un dedo del pie desnudo contra su pierna, sonriendo y mirando a los ojos. Por último, como si ella había compuesto su mente que no era un policía, se inclinó y le susurró un dulce nada en su oreja. Se excavó subrepticiamente de su cartera, algunos proyectos de ley aprobados en virtud de las manos el bar y ella le llevó fuera de la sala.
Sara suspiró. Bueno, pensó, al menos a alguien en un buen tiempo esta noche. Al menos, por su bien, ella espera fue para algunos la diversión. Se espera un buen número de proyectos de ley han sido intercambiados.
Sara estudió el ajetreo y el bullicio de la sala, sipped atrás un par más bebidas, escuchó a un semi decente piano y esperó. Por último, un guapo chico en su 20s vagó en la captura de su atención como él miró a su alrededor el salón. Al parecer, no ver que él esperaba, tomó un stand en la esquina, y se puso a ver un partido de hockey en el televisor.
Poco después, dos atractivas mujeres que Sara se pensaba acerca de la misma edad caminaba en giggled y cuando vieron la studly tipo en la cabina. Una rubia, una morena. Se deslizó en la cabina, uno de cada lado de él, y cada uno le dio un montón en la mejilla.
Sara suspiró. Bueno, pensó, al menos a alguien en un buen tiempo esta noche. Al menos, por su bien, ella espera fue para algunos la diversión. Se espera un buen número de proyectos de ley han sido intercambiados.
Sara estudió el ajetreo y el bullicio de la sala, sipped atrás un par más bebidas, escuchó a un semi decente piano y esperó. Por último, un guapo chico en su 20s vagó en la captura de su atención como él miró a su alrededor el salón. Al parecer, no ver que él esperaba, tomó un stand en la esquina, y se puso a ver un partido de hockey en el televisor.
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